Buganvilia - Día 4 - La Calma

Martes 11 de mayo. La tercera noche fue otra noche sin luna pero con estrellas. Mi turno de 2 am a 4 am lo disfruté mirando las algas fosforescentes que iluminan la espuma (o estela) que va dejando Buganvilia.

Fue una noche con viento cambiando harto de dirección lo cual nos mantuvo a todos en sus respectivos turnos bastante activos.

Al amanecer Juani y Perro tiraron las cañas. Al Perro le pico una barracuda pero la dejó ir, estamos en busca del tuna fish!! Más tarde casi pica un mahi mahi pero no cayó en la trampa. No perdemos la fé, la pesca se trata de paciencia. Mientras tanto no nos podemos quejar con la comida porque hemos comido bien rico!

Es un día maravilloso, con sol, una que otra nube y el color del mar es azulino intenso.

Durante la tarde el viento empezó a bajar y se fue más a popa. Abrimos el gennaker y alcanzamos de nuevo los más de 8 nudos de velocidad. Siguió bajando el viento, el calor se empezó a sentir con intensidad y aprovechamos de darnos un buen chapuzón (siempre en la tarde, cuando los tiburones ya comieron jajaja). Hasta que llegó la verdadera calma, con menos de 2 nudos de viento así que bajamos gennaker y le pusimos un poco de motor con la mayor arriba.

Primera calma, primeros cachos con piscola a bordo para la puesta de sol. Hicimos salud como nos enseñaron nuestros amigos suizos de Makka “proooooost”. Increíble puesta de sol. Las mejores puestas de sol son las que hay nubes.
Luego comimos unos ricos spaghettis de zapallito y zanahoria hechos por mi y a los turnos de noche! Primero estamos comiendo todo lo más fresco, aprovechando, para luego entrarle a las conservas.

El pronóstico dice que la calma seguirá su buen rato pero cada momento, cada condición de viento tiene lo suyo, hasta cuando no lo hay. Ya vendrá!!

Hoy partí leyendo “El viejo y el mar” del gran Ernest Hemingway. El Capitán ya se lo leyó y le encantó.

Ahora otra noche en busca de estrellas fugaces y agradeciendo poder estar haciendo esto.

Un abrazo saladisimo desde la mar. Que como dice E.H. así llaman al océano los que realmente lo aman.

La contramaestre.
From @sailingbuganvilia